Get your Cause

Hola!

Como muchos ya sabéis, antes de venir aquí utilizamos unas plataforma de CrowdFunding llamada Get Your Cause para conseguir dinero y traerlo al campo. Pues bien... ¡ya tenemos nuestra causa! Nos han pedido que nos encarguemos de diseñar y montar lo que va a ser la tienda del campo. Tras ordenar toda la ropa estos días, hoy hemos elegido qué comprar y con el dinero que donasteis hemos podido conseguir percheros, baldas, cajas, perchas, algún espejo... e incluso bastante ropa para las chicas jóvenes, que no encuentran nada que ponerse entre las donaciones y están pasando muchísimo calor (todo lo que llega de verano son vestidos cortos que ellas no pueden ponerse).

Seguiremos con esta tarea hasta el lunes, día que pretendemos inaugurar la tienda y empezar a permitir que los refugiados tengan una vida "un poco más normal" dentro del campo.

 Por otro lado, las obras para decorar la escuelita siguen adelante, y también nos vamos a encargar de comprar pintura negra para que una de las paredes sirva de pizarra.

Además, hoy hemos tenido la suerte de pasar la primera parte de la mañana compartiendo almuerzo y risas en la tienda de una de las familias sirias. Hemos charlado, cantado e incluso bailado la macarena!!

 A mediodía hemos podido acercarnos a un lago a comer y bañarnos antes de la dura jornada de compras y orden de la tarde... Hemos descubierto un rinconcito precioso de la Grecia rural.

Como veis, aquí no se está nada mal... ;)

Seguiremos informando!

Gracias por vuestra visita,

Filippiadas

I love you my friend

 Goodnight babies!


Hoy nos hemos levantado con la sensación de que llevábamos una semana en el campo. Tras dos horas trabajando en el almacén, cada una ha ido a una tarea: Sara y Adriana a la obra de mujeres, Alba a pasar consulta y Jaio a llevar a una niña al hospital, cosa que ha llevado toda la mañana y horas de comer. Cuando ha podido sentarse, suena su móvil: había que llevar a otra niña al hospital. Y en eso se resume todo el día... ¿Todo el día? Sí, todo el día. Aquí va el porqué.

La atención sanitaria en el campo es muy escasa y no hay medios. Por las mañanas hay un médico militar; por las tardes y los fines de semana, Alba. Antes no había nadie. Además, llevar a personas refugiadas al hospital es ilegal... el resultado: un sinfín de papeleo, permisos y protocolos que impiden a las personas refugiadas recibir la atención que necesitan.

También hemos tenido dilemas protocolarios con otros temas: las mujeres vienen constantemente a pedirnos ropa y calzado. Nosotras queremos darles todo el almacén, pero no podemos... Es duro tener que negarles constantemente algo que ves que necesitan, y responder a sus caras de resignación.

Nos hemos ido del campo por la noche empapadas por las "pistolas de agua" (sprays de limpieza) de los niños, y sobre todo, empapadas por sus abrazos, besos y palabras: "I love you, my friend".

Ese equilibrio es el que nos hace mantener la alegría y las ganas de dar más. Ser conscientes de la crudeza de la situación, y a la vez sentir muy dentro cada uno de los momentos de felicidad con ellos.

Gracias por vuestra visita,

Filippiadas